Y de postre galletines

Preparatione profesionale

Estoy cumpliendo el obligatorio parón de blog por exámenes, pero más por mantener la imagen de alegre universitaria que por otra cosa.

Hacer Publicidad y Relaciones Públicas es como leer un libro de Teo, información para dummies. Y más aún si se tiene acceso a los apuntes de quinto de carrera (de periodismo, que es como la versión para Niños Que No Saben Leer Chachi, aunque aún mantengo la esperanza de que los de Comunicación Audiovisual estudien ALGO de verdad que salve a la facultad de Ciencias de la Información de ser algo más que un vórtice de colorines creador de infinitas formas de decir "la radio se escucha y la tele, además, se ve." ) y tras una breve contrastación de documentos se puede observar que los apuntes ponen lo mismo que en primero, en segundo y en tercero, sólo que con más paja (en todos los sentidos de la palabra).

Como la condición de carreras de broma quedó más que establecida en primero (el temario era Lengua, Historia, Conocimiento del medio y creo que te dejaban coger Pinta y Colorea), y ante la incapacidad de suspender nada en esa maldita facultad ni aunque te lo propongas (dicen que el segundo ciclo es lo difícil, pero también dicen que Dios existe) (Aunque no lo dicen los mismos, pero eso es otra cuestión), decidí apuntarme también a Enfermería en otra universidad, y para que tuviera algo de emoción el asunto, en una facultad a 400 km de la otra.

Y esta sí que es la buena. De hecho, creo que todo el mundo que hace publicidad debería apuntarse también a enfermería, o medicina, o derecho, (y a la lista del INEM, ya que están), ya que si la primera se saca con poner bien el nombre en un examen, enfermería es lo que todo yogurín aterrado se espera al salir del cole bocata en mano.

Y más te vale no soltarlo, en segundo te solapan tan alegremente las horas en el hospital con las de clase que, o bien ejerces la picaresca 'epañola robando la comida a los cadáveres calentitos o te metes un bocata de la que vas corriendo a la facultad porque hace media hora que empezó la clase mientras tú estabas bata en ristre salvando la vida al mundo.

Y digo yo, ¿no sería más lógico ir a primera hora a clase y luego al hospital? ¡Pues no! ¡Viva el método de ensayo y error!
"-A ver, chicos, hoy vamos a aprender qué hubiera tenido que hacer Toñi para que no se le muriera la señora de la 589."

Todo esto para luego acabar siendo manager de Llocura, si es que lo estoy viendo.

Mira lo que hace a a las 02.12.06 23:06