Y de postre galletines

Aviso a navegantes

Otra persona deslumbrada por mi Dios-sabe qué. Y ya empiezo a estar un poquito harto. No de que la gente se fije en mí, no, que tampoco lo hace mucha, y el hecho per-sé dista de molestarme. De lo que estoy harto es de que mi Dios-sabe-qué se convierta en un "no eres lo que creía", que suele suceder la mayor de las veces. De manera que aquí va un aviso para navegantes. Si usted, querido/a desconocido/a, descubre en mí un resplandeciente Dios-sabe-qué, no lo mire mucho. Normalmente este tipo de hayazgo se torna en poco tiempo en una declaración del tipo "al principio me deslumbraste, pero con el tiempo he descubierto que eres un tal y un cual". Y miren, a mí estas cosas no me sientan demasiado bien, ¿saben?
De manera procuren tener en cuenta, desde le primer de los momentos, que yo soy un tal de aúpa, y un cual de agárrate y no te menees. Y me encanta ser así, de veras que no es mi intención aparentar ser un Dios-sabe-qué, y no sé exáctamente en qué consiste.
Resumiendo, que si a ustedes no les gusta que sea un tal o un cual, pues miren, es su putísimo problema, a mí dejenme tranquilito y ahorren la espeleología humana y psicológica para otros especímenes deslumbrantes y maravillosos por descubrir. Yo lo hago lo mejor que puedo, si no es suficiente, pues no haber comprado el billete, pero por lo que más quieran, ahórrense eso de que no soy lo que esperaban, porque no se lo consiento ni a mi padre. Aquí no se permite sacar los brazos del arnés y la empresa no se hace responsable del tiempo perdido durante el trayecto.

Yo a mí mismo me deslumbro bastante. Y en pelota picada cuando me ducho, más. Y no, no es una cuestión de que los ogros tengamos capas como las cebollas, entre otras cosas porque yo no soy un ogro, yo soy un troll. Y un tal y un cual. Coñoya. Los cuentos de hadas y los príncipes azules están tres puertas más allá, a mí dejenme tranquilo y no esperen absolutamente nada. Así nadie se llevará decepciones.

Cabezón, arrogante, gruñón, egoísta, resabido, cascarrabias, con mal humor y peor conversación. No tengo absolutamente nada que ofrecer. ¿Estamos? Pues eso...

Mira lo que hace Somófrates a las 10.14.04 15:01