31. jaanuar 2005

Gilitozudencias

Hay pocas cosas que consigan ponerme nervioso. Pero cuando me pongo, no hay quién me soporte. Cuando me cabreo por algo y me sube la bilis, resulto desesperante. Cuando algo no me entra en la cabeza, me pongo “seek and destroy”. Y, sí, me equivoco, y hasta termino por admitirlo (a mi manera, eso sí), cuando me frustro o me obceco con algo. Pero lo que rara vez me vais a ver hacer nunca jamás es pedir perdón.

Me consta que hay quienes se preguntan si yo nunca pido perdón, o por qué no lo pido. Por eso escribo este post, pese a que no me haga especial gracia hablar sobre el tema.

Pedir perdón es asumir no sólo una responsabilidad, sino un compromiso. Es pretender desenmascararse, entrar en una especie de burladero sagrado en el ruedo de las relaciones humanas, salirte totalmente de tu papel y, a modo de grotesca toma falsa, arrastrar tu dignidad ante la evidencia.

Yo, alguna vez lo he hecho, con todo lo que eso conlleva. Pero no consigo concebir como la gente es capaz de pedir perdón tan alegremente y tantas veces a lo largo de su vida. Sí, claro, por supuesto que saber reconocer la culpa es signo de honradez, pero esto dista mucho de pedir perdón.

yakuzatat.jpgLos japoneses, ese amago de cultura que yo tanto desprecio en muchos aspectos, en este sentido destacan. Hay quien dice que están emocionalmente inhibidos, yo lo que creo es que huyen de la frívola personalidad de occidente. Por eso rara vez veréis a un japonés pedir perdón con el descrédito con el que se pide por aquí. Antes se hará un siete en el pecho, o se cortará un meñique (sí, exagero, pero veis por dónde voy).

Pese a ser bastante cabezota, termino por no ponerme trabas a la hora de admitir un error. E incluso puedo arrepentirme. Y hasta puedo (sólo para y por mí) proponerme en ocasiones una pauta o norma para corregirme y evitar recaer en el mismo error (y nunca de cara a nadie más, ya que es una opción personal, y las cosas se demuestran haciéndolas, no diciendo que harás o dejaras de hacer tal o cual cosa). Mis errores forman parte de mí tanto como yo mismo. Cuando decepciono a alguien, no pediré perdón, ya que de esa persona depende el decidir si puede asumir ese rasgo, ese error, o ese gesto, y perdonarme o no.

Cuando yo pido perdón es porque quiero suplicarlo. Cuando veo que puedo perder más que mi propio orgullo o mi dignidad (que no son pequeños). Y, repito, que no tiene nada que ver con admitir un error, que eso acabo por hacerlo la mayor de las veces; no suenan igual un “lo siento” que un “perdóname”. Joder, un “perdóname” es de estas cosas que, o salen de verdad, o hacen que la boca te sepa a mierda durante días.

Por eso creo que lo peor que le puede pasar a alguien, es pedir perdón (de verdad, del que vale, del que realmente hace falta) y que no se lo den. O que se lo den de malas maneras. O que se lo den sólo de voz. Me parece un desprecio brutal hacia esa persona y hacia su dignidad. Casi tanto como esperar a que alguien te pida perdón. Pedir perdón es el argumento máximo para un segundo juicio, cuando esa persona ya ha decidido no dártelo desde un principio. Para mí frivolizar con esto es faltar al respeto.

Yo sólo les he pedido perdón a dos personas en este mundo (y una de ellas no se respetaba ni a ella misma), y espero no tener que pedírselo a nadie más. Errores los seguiré cometiendo a miles, eso seguro, y los reconoceré sin ningún problema cuando me parezcan tales (y he dicho “cuando me parezcan tales”, cuando no me lo parezcan, ajo y agua que a mí a cabezón no me gana ni un dieciséis ruedas). Y es lo que hay. Bendito sea quien me quiera lo suficiente como para perdonarme por ellos, pero desde luego que no esperen a que yo se lo pida, porque no lo haré.

La gente que pide perdón demasiado a menudo, termina por devaluar su palabra y su sentido. O bien demuestran que lo que sale de su boca son sólo palabras que no llevan nada en ellas.

Fue Somófrates a les 15:08 | Comentarios (15)


27. jaanuar 2005

Piñaun

Hace un frío que jode. Tengo los gayumbos que parecen un banana splitz con pelos, coño. Encima se me ha borrado la banda magnética de mi tarjeta de seguridad y he tenido que esperar media hora esta mañana en la puta calle a tres bajo cero a que me dejaran entrar.

Y es que yo sufro mucho y a penas me quejojojo. Pero quien de veras va de culo y cuesta abajo es mi niña cruji-pollo. Cual Yushenko cualquiera, el club de fans de Batman de Madrid, en cuya sede reside, me la tienen sin internet, sin calefacción, sin agua caliente y, si la tuviese de antes, sin dignidad humana alguna, a base de patatas y conejo. Si será así, que ya no le funcionan ni las válvulas barrigales. Y no solo eso, sino que encima el peluquero le ha dejado un flequillo que ahora la muchacha parece el espantapájaros del mago de Oz.
Es todo una conspiración, guaja.

El pensamiento filosófico de hoy es:
La calidad de las películas porno se mide al revés que las convencionales. Las verdaderamente buenas son aquellas en las que no puedes aguantar hasta llegar al final.

En fin, sin más pasamos a los resultados de la jornada de ayer, Miércoles 27 de Enero de 2005:

spam.JPG

De los dieciocho comentarios dejados ayer en este blog, dos son del autor, seis de gentuza con demasiado tiempo libre (que son los únicos que me interesan), y diez del spam, que con el fichaje reciente de RAM, no para de anotra tantos.

En fin...

A la fan incondicional que me pedía una foto mía de cuando era chiquitajo, y como lo prometido es deuda, allá va:

littlesomo

recorte.jpgPor cierto, a todos aquellos manifestantes que se solidarizaron con las víctimas del terrorismo frente a la sede de la SER vitoreando a Acebes y gritandole a Pilar Majón que se meta a su hijo muerto por el culo: explotad de una vez como las infectas bolsas de pus que sois, hijos de puta.

Este ha sido el post relámpago de hoy.

Fue Somófrates a les 13:14 | Comentarios (13)


26. jaanuar 2005

¡A mí, mis mutantes!

Hace ya bastantes veranos, yo tenía un mutante que se llamaba Mario. Quería comprarme un ordenador nuevo, de manera que estuve una temporada trabajando por las tardes en una empresa de venta de cupones de minusválidos, disfrazada de ONG.

En aquella oficina de mierda yo debía dar la imágen de que aquello en realidad era un archivo para una especie de bolsa de trabajo para discapacitados, y de vez en cuando venía alguna madre con el currículum de su niño, a ver si se lo podíamos colar al alcampo como mozo de almacén, o alguna licenciada recientita de magisterio pidiendo trabajo, o vaya usted a saber qué. También repartíamos los premios, de manera que cuando a alguien le tocaba algo, fotocopia, grapa, firma y billetazo.

Y, por supuesto, los viernes venía toda la patrulla X a recoger los cupones para la semana siguiente. Y allí había de todo, oigan. Los peores eran los discapacitados físicos, que, en su mayoría, eran hijos de puta bastante amargados y bastante bordes, por todo y por nada en particular. Pero también había gente bastante maja, que siempre se quedaban veinte o treinta minutillos a charlar, a beberse un vasito de agua conmigo antes de volver al bar a vender, o a escuchar un ratito a Gemma Nierga en la ventana.

Uno de los mutantes era Mario, al que le faltaba más de un tornillo. Mario a veces venia con su pandilla, también mutantes todos, a saludar y contarme su día, a preguntar si ayer alguien dió algún premio porque él quería mantener el récord. Fué al mes justo de trabajar allí cuando yo me corté las melenas (de ahí que empezaran a llamarme Charles Xabier), por lo que Mario me identificó al instante. ¡Tú eres jebiiiii! El chaval (y su pandilla) se sabía de memoria todas las letras de Iron Maiden y de los Queensryche, sin tener ni puta idea de inglés. Se inventaba muchos palabros que, más o menos, sonaban como la original, pero se venía a la oficina, me cantaba alguna, y yo se las traducía según me iban sonando.

fearofthedark.jpgNo sé qué cojones habrá pasado con aquella panda de mongolos afectados por el dawn. Yo conseguí las 150 para mi ordenador y salí cagando hostias de allí (cualquier día podía aparecer la policía con una denuncia a confiscar archivos, o vete tú a saber, aquello era un vertedero inmundo donde cuatro cabrones se aprovechaban de cuarenta desgraciados). Pero de vez en cuando me acuerdo de Mario y de su pandilla, porque eran un grupo de personas que no entendían el mundo y no les hacía falta, porque eran gente que no necesitaban aparentar nada, porque eran gente que te soltaban las cosas tal cual, y porque eran tontos del bote y lo sabían y eso no les causaba ningún problema. Eran unos tíos super majos, siempre contentos, siempre con ganas de contarte sus movidas, siempre con ganas de hacer cosas, siempre con ganas de ayudar a los demás en lo que pudiesen. Y son gente que no tienen ningún problema ni ningún reparo en mostrar afecto, que jamás van a llegar a nada en sus puestos de trabajo, que nunca jamás van a tener ocasión de fundar una familia o labrarse una vida, que jamás sabrán lo que es estar con una chica o tener novia. Incluso es dificil que pasen de los 35, dada su enfermedad. ¿De qué coños voy a quejarme yo habiendo gente como Mario tarareando el "fir o de dar" tan contentos por el mundo?

Serán tontos...

Fue Somófrates a les 12:37 | Comentarios (5)


¿Vicio? ¿Yo? No, qué va...

Fue Somófrates a les 01:03 | Comentarios (4)


25. jaanuar 2005

El trasbase del Ebro

paparouco.jpg

¡Viva yo y mi paint de windows!

Fue Somófrates a les 12:54 | Comentarios (3)


Vergüenza

Me jode mucho, muchísimo, tener que adoptar ciertas posiciones con respecto a la política. He llegado a un punto en el que, antes de posicionarme con libertad ideológica, me veo haciendo de ladrillito en la barrera que, por puro sentido común, se debe de levantar ante el viejo vientre inmundo que sigue siendo fértil (definición de Raúl del Pozo).

A mí el PSOE siempre me la ha traído floja, siempre me ha parecido una opción tibia a la que se le caen las intenciones por el camino. Supongo que es el precio de conformar un grupo tan mayoritario. Pero no es mi opción. O no debería serlo. Si de mí dependiese, aborto hasta los 72 meses de gestación del feto con la única voz pertinente de la embarazada, matrimonio con quien a uno le dé la puta gana mientras sus guarrerías las hagan entre ellos y sin molestar, la iglesia ilegalizada y considerada banda armada, prostitución sindicada reconocida y con convenio, droga legal y al alcance de todo aquel mayor de edad lo suficientemente gilipollas como para querer consumirla, y los gastos del ministerio de defensa íntegros a I+D y ayudas sociales nacionales e internacionales.

Y, aún así, en este juego que nos quieren marcar entre PP y PSOE, de agresión política, de crispación y de echar balones fuera, sigue sin haber color. Cualquier comparativa ecuánime sigue siendo un intolerable agravio a la inteligencia de uno. De ése pozo pútrido y hediondo que es la derecha española nunca jamás ha salido ni saldrá nada bueno para España o para los españoles. Ése hatajo de acomplejados cobardes inmóviles que se empeñan en retroceder a hostias si es necesario contra la corriente de la evolución social están llevando ése mismo panorama hasta sus límites. La derecha, afín a su naturaleza, juega sucio y se ampara en la permisividad de la moral y la ética de la izquierda, en el principio básico del progresismo del derecho a la igualdad y el derecho a expresarse (derechos que a bien tienen de vetar a quienes se les oponen en cuanto pueden). Sus valores son la cerrazón, la depredación del que puede sobre el que no, el vampirizar a la minoría, el enmendarse con fé católica al derecho del más fuerte. Para ellos la moderación es tan sólo mentir para así ampliar el espectro de su arsenal, más posibilidades de manipular.
Se tergiversan las palabras, se transmutan sus significados, se repiten hasta borrarles todo su sentido. Llenan sus infectas bocas aún con restos de muerte entre sus dientes con libertad, con democracia, con dignidad, con derechos. Se alimentan de la masa, otrora protagonista y estoica, hoy servil e ignorante; han domado las aguas del cambio que cuando se desbocaban todo lo arrasaban a su paso, esas aguas llamadas libertad, fraternidad e igualdad, esas aguas que dejaron a sus muertos, mártires a lo largo de la historia para que nosotros, sus hijos y sus nietos disfrutemos de eso que ahora nos han robado mientras dormiamos, que algunos ni tan si quiera han llegado a conocer. Se han apropiado de hasta nuestra historia.
Ni si quiera respetan a su crucificado Dios Dinero, capaces de prostituir su propia base, atentando contra los mismísimos principios del capitalismo. Y a ese juego hecho para ganar, en ése tablero de dados trucados donde nos han colocado a la fuerza, nos escupen.

Y no es defensa de la izquierda, ni es defensa política de nadie. Es retrato de la derecha, es denuncia del violento acoso al que nos someten. Es un "basta ya" a este desaforado caudal que está llevando a la sociedad a límites de vergüenza que ya hemos vivido antes.

No les dejéis. En nombre del sentido común y del progreso, que no os arrebaten lo que por herencia es vuestro. No les dejéis.

Fue Somófrates a les 12:17 | Comentarios (5)


24. jaanuar 2005

Otra cliente satisfecha

Me encuentro a fecha de hoy en un post de Diciembre que una tal Cecilia Von Hauer me ha dejado el siguiente comentario:

"primero aprende ortografía y gramática, antes de publicar algo, por que escribes terrible, y mira que las personas que se dedican a investigar a las que tu llamarías geeks, nerds, o personas sin que hacer, gracias a las investigaciones que han realizado y la puesta en práctica de éstas, puedes tener tu paginita de mierda en donde te expresas de esta tan ignorante manera,y sabes elq ue sean mas intelectuales que tu no significa que no tengan una vida,yo por ejemplo asisti a la universidad a la mejor del país, no me perdía una fiesta simepre salia a discos y bares, era popular, fui la reina de la unviversidad, cursé una maestría y tengo un muy buen puesto en publicidad y mercadotecnia de una empresa transncional de acero, entre a tu pagina por casualidad, debido a un estudio que estoy haciendo, además tuve tiempo para casarme con un hombre bueno y trabajador. Y durante toda mi maestría trabaje medio tiempo como investigador, asi que no me vengas que las investigaciones que rea!lizan instituciones no sirven para nada, si no imbécil si no hubiera habido desarrollo no pudieras tener este foro virtual."

benny.jpg


Mi querida Cecilia:
Sé que no todas las mujeres del planeta sois gilipollas (es más un presagio que un dato contrastado), pero creeme cuando te digo que cada vez me cuesta más trabajo tener fé en ello. Sin más, recibe un cordial pollazo en la frente de mi parte.

Con cariño, un admirador.

Fue Somófrates a les 17:58 | Comentarios (9)


Qué pocas ganas de ná...

bonotapacara2.jpgQue la asociación de víctimas del terrorismo es un órgano manipulado es una de esas cosas que no se pueden decir en voz alta porque, claro, se les ha muerto gente de un tiro en el melón. Así que no lo diré.

Que no estoy de acuerdo con los principios del nacionalismo (a cualquier escala) no es nada nuevo. Sin embargo, el no estar de acuerdo con una idea no me da derecho a demonizar una opción política que, a ojos de nuestra constitución, es inocua y perfectamente viable.

Que en una manifestación convocada por la asociación de víctimas del terrorismo se vea como normal el lema "España es una y no cincuenta y una", me induce a pensar que no se manifestaban contra la barbarie del terrorismo (ultimamente tan presente en todos los rincones del planeta, y a mi parecer hostigado interesadamente por los neocons*) sino contra el nacionalismo. Más concretamente, el vasco.Bush_2.jpg

A Peces Barba se le amenaza con exigir su dimisión por no haberse presentado a la manifestación (que mandaría huevos tras lo visto en la comisión del 11-M). Podría estar de acuerdo. Es más, lo aceptaría, incluso, y pese a obviar el trato que recibieron en la manifestación los socialistas José Bono y Rosa Díez junto a sus familias (los dos millones que marchamos por Madrid en dos ocasiones contra la guerra éramos bárbaros porque aparecieron pintadas en las sedes del PP, pero esto es gente bien civilizada que usan puños y palos en lugar de destruir la propiedad ajena). Y hasta evitaría el echar balones fuera preguntándome dónde estaba, por ejemplo, Rajoy.

Rouco.jpgAdemás, Rouco nos dice que somos una ciudad que peca masivamente. Y eso es algo que a mí personalmente me frustra muchísimo. Porque yo soy un gran pecador, pero sólo de vocación. Me gustaría pecar muchísimo más de lo que actualmente acostumbro. Si fuese gay podría arroparme en la promiscuidad propia de los demás hombres, pero es que encima tengo la desgracia de que me gustan las mujeres. Mucho. Y es que yo tenía que haber sido del opus, coño, y así al menos en los periodos de sequía podría alegar con orgullo que si no follo es porque no quiero.

Claro, que igual se refería al fútbol. A mí no me gusta el fútbol. Y, desde que vivo junto al Santiago Bernabeu, menos. Desde un tercer piso no oigo el jaleo de la Avenida del Brasil los fines de semana en madrugada, tal es el aislante del que disfruto. Sin embargo, cuando el puto Beckham mete un gol se me caen hasta los vasos de la estantería de la cocina. Además, como no soy aficionado, no sé cuando hay o no partido, y dá un gustito tremendo salir de casa un sábado con el tiempo justito para ir a dónde hayas quedado con la top-model de turno para ver como de las bocas de metro no para de salir gente. Parecen cucarachas. Y ahí ya no valen semáforos, ni calles, ni nada, es todo como una riada de búfalos cruzando el valle de caballo-loco. Y, hala, a patita a coger el metro a Cuzco (no hay taxi que valga).

Cuando yo estaba en el colegio el fútbol me tenía muy acomplejado. A mí es que no me gustaba ver a veinte(?) tíos en calzoncillos corriendo detrás de una pelotita, y no comprendía la pasión que podía levantar entre mis compañeros (es más, incluso me incomodaba en ocasiones). Yo debía mi tiempo de ocio a cosas más interesantes, como las artes ocultas de los ninja asesinos, o la construcción de pirámides alienígenas con Tente que adoraban a extraños dioses interdimensionales. Mientras los demás niños imitaban a sus ídolos en el patio del colegio, yo era la última línea de defensa, y construía trampas mortales con piedras, palos y cuerdas en los columpios para combatir a los invasores de párvulos (the price of freedom is eternal vigilance), ¡para que luego mi madre dijese que no hacía nada en el cole...!

Por aquél entonces las chicas me parecían muy tontas. Bueno, me lo siguen pareciendo, pero me refiero a que me parecía tonto perder el tiempo con ellas. A sus doce añitos, todas intentaban vestir como ejecutivas, pero se pintaban como fulanas, lo cual acabó con la acuñación del término "chicas pilot" (de puta fina). Yo sólo me trataba con una, cuyo nombre ahora me haría bastante gracia (Cristina Aguilar). Nos conocimos en 5º de EGB, el primer día que yo llegué a aqél cole y ninguno de los dos conocíamos a nadie. Como teníamos peculiaridades con las comidas, yo me comía sus manzanas, y ella se comía mis huevos. Era una gran simbiósis, como veréis. Pero con el tiempo se convirtió en una chica pilot, y todo se fué a la caca-futi.

shaun.jpgEstas cosas son como las películas de zombis, joder. O de vampiros, o de hombres lobo, son todas iguales. Ya sabéis, lo de la puticosis, el rollo de "tu la llevas", el "ahora te muerdo y eres de los míos". Cuando al colega, o al allegado del prota le muerden, y se convierte en bisha. No hay cura, coño. Y me refiero a un remedio, no a un clérigo. Un día ves a ese/a colega por la calle y te dan ganas de gritarle algo, o de saludar, pero luego recapacitas, "no, no, es uno de ellos, ya no es esa persona que yo conocí, si llamo su atención emitirá algún tipo de desagradable sonido gutural y, con los ojos en blanco, procederá a comerse mi cerebro, y esto será una masacre, y acabaremos todos con la puticosis, y terminará por desinfectar la zona el ejército a golpe de lanzallamas". Claro, que bien pensado, eso también molaría un puñao...

Y hasta aquí mi ejercicio de hoy de "escriba un tocho sin pensarlo".

* Yo quiero que se me apode con un termino tan chulo como "neocon", que estoy hasta los somitos de ser un "progre rogelio". Yo quiero ser, por lo menos por lo menos, un autobot.

Fue Somófrates a les 16:50 | Comentarios (6)


21. jaanuar 2005

¡Pienso morirme sin haberme puesto un condón!

Fraga.jpg

Pero es por dos motivos:
1.- Para usarlo se te tiene que empinar.
2.- Para ser la parte pasiva no hace falta calzarselo.

Muérete de una puta vez, viejo de mierda. Tú y todos los que predican por la muerte del tercer mundo a manos del sida. Ya podíais haber hecho caso a los curas cuando decian "no a la guerra", panda de cerdos.

Fue Somófrates a les 10:09 | Comentarios (11)


20. jaanuar 2005

Da-bu!

Anécdota cachonda: Gultrok.JPG
Estaba yo ayer jugando a la beta del World of Worcraft Europa, curtiendo algo de cuero de lagarto a las puertas de la imponente ciudad de Ogrimmar para hacerme una chupita de cuero con mi orco de nivel 19, cuando una delgada hembra troll de nivel 10 ataviada con pieles de lobo, una espada roma y un escudo de madera, se me acerca y me pide ayuda. Por supuesto, todo esto en inglés. Me dice que a ver si podría ayudarla o, al menos guiarla, a algún lugar donde habiten bandidos centauros, porque necesita matar a unos cuantos para cumplir con un contrato mercenario pendiente.
A cualquier otro le habría dicho que no, pero a una troll con esa piel azulita, esos colmillos y esos pelos rizados detrás de las orejas, no le puedo negar nada. femaletroll.gif De manera que me pongo a escoltarla por las llanuras de Durotar hacia el asentamiento comercial de Crossroads, habitado principalmente por artesanos orcos y cazadores minotauros. De ahí, partimos hacia un oásis que había descubierto hace un par de días de camino al puerto de Ratchet, muy frecuentado por centauros. Llegamos, vimos, y les dimos una patada en el culo. Teñimos las aguas de rojo, bebimos sus fluídos usando como copas sus huecos cráneos, y demás parafernalia que se suele hacer por el continente de Kalimdor cuando la gente se aburre.
El caso es que mientras haciamos todas aquellas cosas, pues charlamos un rato. Yo ya pensaba que mi inglés debía de ser peor de lo que yo lo recordaba, pero tras una hora de conversación absurda, va la muchacha y me pide disculpas por su inglés, que es que ella "is from Spain", y que no se entera de la misa, la mitad. De Zaragoza, para más señas.
Lo jodido no es sólo eso. ¡¡Lo jodido es que incluso nos conocemos!!

Y es que el mundo es un pañuelo. El de Azeroth, quiero decir...

Por cierto, imaginad que un desconocido que se hace llamar Mr.Kaik coge y os manda un retrato vuestro sobre un papelote con publicidad de un garito por e-mail. ¿Qué hariais?
Pues está claro: colgarlo en vuestro blog...

uh.JPG
Fue Somófrates a les 14:25 | Comentarios (5)


19. jaanuar 2005

No te escondas, que es peor

Venga, va, que al leer el comentario de Lua me ha entrado el gusanillo; os voy a contar mi "por qué no" de lo que es una venganza.

Dicen que la venganza es un plato que se sirve frío. Y yo os digo que hagáis la prueba a meter un perolo de caldo de pollo en la nevera durante dos días y luego os lo comáis, a ver qué os parece.

La venganza es un plato que ha de servirse caliente, pero que por reservas de vivir en una sociedad legislada en parte por poderes punitivos muy a tener en cuenta, pues uno ha de cortarse un pelo. Pero nadie me puede negar que es en el momento en el que se te revuelven las tripas y te pican los ojos cuando mejor te podría sentar el agarrar un hueso del suelo, cual mono a lo 2002: una odisea en el espacio, y liarte a zurriagazos. Pero como no puedes, porque eso está muy feo, pues te limitas a decir "¡volveré, Gadget!" mientras acaricias a tu gato a bordo de la capsula de escape de emergencia de tu base submarina secreta que está ahora mismo saltando por los aires.

Venga, va, reconocedlo. Todos hemos revivido en nuestras mentes esa hora "H" de ese día "D" que todos hemos tenido alguna vez. Y nos machacamos "cagontó, tenía que haberle dicho tal o cual cosa", o "joder, si es que le tenía que haber mordido la cabeza". Pero, admitamoslo, no somos el jinete pálido, y nuestras vidas no están guionizadas por Tarantino, ni dirigidas por John Woo.

Yo, personalmente, sólo he regalado dos güantazos sin agresión física previa hacia mí. El primero fué un alluuuuuken contra una pared de ladrillo, y evidentemente me ganó la pelea destrozándome los nudillos. El segundo fué más un empujón en la cara de mi interlocutor (que lo sentó de culo en el suelo) más que un golpe en sí, y me arrepiento de haberlo dado. No me siento para nada orgulloso de ello. Pero me sentó jodidamente bien, coño. Lo hice en caliente, en el fragor de su pretensión por humillarme. Fué (lamentablemente) épico.

Ahora bien. Servir la venganza fría. Para esto te tienes que tragar los tropezones de grasa helada que hay flotando en el caldo de pollo que metiste en la nevera. Y aguantar las arcadas. Es por esto que, por lo general, y más rápido aún que las ansias de venganza, lo que se enfría es el recuerdo mismo de la ofensa. Y llega un momento en el que ni piensas en ello; se te ha olvidado. Pasas de todo y a tomar por culo. Que se tome el caldo helado su puta madre.

Sin embargo, existen cuatro excepciones a esto, a saber:
1.- El malo secuestra a tu novia en Chinatown para sacrificarla en una misa satánica y, no contento con eso, además te roba tu camión de dieciséis ruedas.
2.- El malo mata a tu mejor amigo, que es negro, y además le quedaban dos días para licenciarse y volver a su hogar en Missouri, donde juntos íbais a montar una cadena de túneles de lavado con chicas en top-less cuando terminase la guerra.
3.- Un principe troyano caprichoso convence a tu mujer para fugarse con él con nocturnidad y alevosía, dejándote en evidencia ante los súbditos de tu nación.
4.- Realmente ALGUIEN TE HA TOCADO LOS GÜEBOS. Y cuando hablo de tocar los GÜEBOS me refiero a cosas como perder un hijo o que te rayen el CD 2 del baldur's gate.

En esos casos sí entiendo que alguien dedique su vida, sus fuerzas, su salud y su esfuerzo a algo tan poco práctico como es joder al prójimo en plan psychothriller.

Pero, por lo general, vengarse es un rollo patatero. A mí ganas no me faltan, pero siempre acabo por no practicarlo si es en frío, o por largarme a mi casa antes de tener que hacerlo en caliente.

headfirst.jpg
Fue Somófrates a les 16:44 | Comentarios (5)


18. jaanuar 2005

Who's bad

Los que somos muy hijos de puta normalmente nos amparamos en aseveraciones del tipo "nadie es verdaderamente bueno" para justificar nuestras miserias y poder así conciliar el sueño por las noches. Disimulamos, o intentamos disimular nuestra intransigencia, nuestro egoísmo, nuestra desconsideración y nuestra cerrazón aludiendo a la intransigencia, egoísmo, desconsideración y ombliguismo de los demás.

Luego los hay que, simplemente, son tontos de remate. Yo cumplo un poco de ambas. A hijo de la gran puta no me gana ni Dios, sin embargo adolezco de imperdonables defectos que incapacitan y limitan la tétrica garra que mi negro corazón insiste en arrojar sobre todo lo que me rodea. Pese a que varias veces me han reconocido ciertas dotes para la interpretación (lo que yo no considero que vaya más allá de tener cara de payaso y musculatura facial capacitada para ello), soy incapaz de disimular un ataque de bilis, o de celos, o de envidia, o de ira, o de lo que toque ese día. Muchos dicen, no obstante, que es preferible ser un borde intratable antes que mantener las apariencias y guardar puñales emponzoñados apretando los dientes bajo el embozo durante días, aunque estén predestinados a aterrizar sobre sus víctimas fríos, mal y a destiempo. Pero es que me dá igual. A mí lo que me gustaría es porder guardar esos puñales, y guardar las apariencias, y guardar mis miserias de intestino grueso para arriba.

Yo lo que quiero es ser un cabrón anónimo, del montón, corriente y moliente. Un cabrón auto-realizado, vamos. De los que dicen no arrepentirse de sus errores, pero si se les plantease de nuevo la tesitura no repetirían la historia (y ni lo uno ni lo otro, claro, que todos llevamos un perraco dentro). De esos que aburren a fuerza de repetir que no odian a nadie, que tan sólo sienten lástima por los demás. De los que se lían a llamar egoístas a los demás cuando no quieren jugar a lo que él quiere. No, en lugar de eso a mí me comen los remordimientos, y cuanto más tiempo dejo pasar sin arreglar las cosas, más me pesan, y más culpable me siento aún cuando sé que no es culpa mía (pero invento un muerto, si hace falta, y me río un rato más). Que yo no siento lástima por nadie más que por mi gato, que está capao, y que sí que odio y desprecio a muchas personas, por ser más tontos (o mentirosos) y mucho menos hijos de puta que yo, y conseguir hacer millones de veces más daño del que yo podría conseguir hacerle nunca a nadie (y mira que me lo propongo, pero está visto que hasta que no me compre un armalite y me suba a un campanario...) Que yo no canto al egoísmo de nadie, sino que pongo el mío por delante, y las cosas por su nombre, y si hay que sacársela y medirsela, pues te la sacas y te la mides tú, que yo me la chupo solito (porque llego).

Coño. Yo venía a hablar del camionero aquel que se cargó un puente de la M-30 y mirad lo que me sale...

En fin, pues eso, que hijos de puta todos. Incluído el señor camionero este que nos colapsó Madrid el otro día, desde las ocho de la mañana hasta las once de la noche, y se llevó viga y media del puente por el que se empecinó en pasar. Cadena perpetua a falta de pena de muerte. Y algunos, en su falsa compostura cívica y de estado, estarán pensando "¡halasageraooooo!"; pues no. A la picota.

Veréis, yo puedo coger y matar a pollazos en la nuca a alguien esta noche. Y violarle. Y robarle. Y descuartizarlo y luego comermelo. Y hasta dejarme algo en el plato con la de niños negritos que hay en el mundo muriendose de hambre, y yo aquí, tirando la comida. Es una putada, lo sé, pero estoy molestando a UNA persona. Vale, luego hay familiares y amigos, de acuerdo... ¿doce? ¿quince? ¿veinte personas?
Pero, coño, el camionero este, nos ha dado por el culo de uno u otro modo a CIENTOS DE MILES de ciudadanos, amén del gasto público que supondrá reconstruir el estropicio. Es más, los familiares del tipo ése que he defenestrado a cimbrelazos recibirán indemnizaciones, heredarán, hay pensiones, subvenciones... pero a los que nos quedamos horas atrapados en aquél atasco, nadie nos paga ni un triste bocata de lomo adobado con pimientos.

Indignante. Desde ese día, pienso llevar aperos de labranza y antorchas en el maletero, junto al chaleco reflectante y las señales de emergencia.

En días así uno se plantea crear un blog y firmar como "Macho Rudo", pero por desgracia ya existe un hombre malo en el mundo (y sabe dónde vivo...)

PD: Se me olvidaba:

30.jpg
Fue Somófrates a les 12:21 | Comentarios (7)


17. jaanuar 2005

Mundo gilipollas

(Post correspondiente al jueves día 13, que por motivos ajenos a la empresa no pudo ser publicado).

Vivimos en un mundo evidentemente gilipollas. Tanto es así, que hoy tenía varios temas posibles sobre los que perder el tiempo, y desde que tiré a la papelera aquella libreta de notas, ahora tengo que apuntarlo todo en asquerosos post-its que acaban desparramados, plegados, y machacados en el fondo de mi bolsa. Esperemos que la memoria no me falle.

Leo en yonkis.com que tras el informe que Amnistía Internacional realizó estas navidades con respecto a la negatividad de los videojuegos y su perniciosa influencia en los niños, el diario gratuito “Metro de Madrid” ha decidido retirar la publicidad que este título tenía en sus páginas: "[..] Según el informe de AI, en el juego 'Grand Theft Auto: San Andreas', uno de los más vendidos este año, mujeres en ejercicio de la prostitución son objeto de agresión y asesinato por parte de quien protagoniza el juego."

Sabréis que pese a no haberme dedicado académicamente al estudio de la rama (ni puta falta que hace, por lo que tengo entendido), siempre he seguido por hobby más que por otra cosa este mundillo de la manipulación de masas llamada periodismo, y que con orgullo proclamo la definición de la profesión como “el arte y subterfugio de aparentar propiedad al hablar de temas sobre los que no se tiene ni puta idea”. Vamos por partes.

El informe que realizó Amnistía Internacional trataba sobre la violencia y el escaso valor educativo que tienen los videojuegos en los jóvenes, sobre todo considerando los recursos de que disponen las distribuidoras a la hora de captar la atención del usuario, mayoritariamente varón. Especial hincapié tuvieron en el título 'Grand Theft Auto: San Andreas', que con sólo cuatro meses desde su publicación para playstation2 ha batido ya récords de ventas y recaudación inimaginables hasta para la industria cinematográfica de Hollywood.

Primeramente, existen datos que se le escapan a Amnistía Internacional. Primeramente, que en todos los países en los que se publican los videojuegos que conforman su estudio conllevan una nota aclaratoria en la mismísima carátula advirtiendo de la edad recomendada para consumir el producto. Como si de una película de vídeo o DVD se tratase, vamos. Que un niño de ocho años juegue a 'Grand Theft Auto: San Andreas', es responsabilidad tan sólo de sus tutores, los cuales probablemente hayan caído en el error de suponer que la industria del videojuego está orientada a un público infantil, cuando la media de edad de los consumidores es de 25 años.

En la saga de 'Grand Theft Auto' al jugador se le propone desarrollar una carrera criminal para hacerse con el control de una ciudad siempre a través del crimen. Y de un modo bastante cinematográfico, he de añadir; es fácil encontrar constantes guiños a los clásicos modernos del cine negro. De este modo, y al igual que las películas, 'Grand Theft Auto: San Andreas' no deja de ser una caricatura de la realidad, no es nueva la figura del padrino, no es nueva la figura del sicario, no es nueva la figura de traficante. Y hacer un juego para adultos con el suficiente humor cafre como para encarnar esos roles es un gran (y original) factor a tener en cuenta al plantearse el éxito comercial de estos titulos.

Respecto a eso tan sonado de ir matando prostitutas, pues sí, suena muy mal. Y lo peor de todo es que es verdad. Pero no solo matas y agredes a mujeres, y más concretamente a prostitutas, sino a todo lo que se te ponga en contra y por delante. Por eso no se puede tachar a este juego de sexista. Revientas ya sea a tiros, ya sea a patadas en la cabeza, a todo lo que tengas que matar, indistintamente de sexo, raza o religión. Todo ello con un desprecio por la vida y por los valores que deberían caracterizar a una sociedad civilizada impresionante, y si me preguntáis a mí os diré que me parece una idea genial y divertidísima. Si lo que preocupa a Amnistía internacional es la violencia explícita, y sólo en el caso de que esta sea aplicada a una mujer (tal vez a estos señores no les preocupe tanto el hecho de que sea aplicada a los varones, o tal vez lo vean más normal), quizá deberían empezar por censurar el papel de Paz Vega en “Sólo mía”, por ejemplo.

Y quiero insistir en aquello de la calificación por edades. Yo no dejaría a un niño de ocho años jugar a 'Grand Theft Auto: San Andreas', del mismo modo que no le dejaría ver “Scarface” de Al Pacino. Eso sí, seguro que Amnistía Internacional no realiza estudios sobre los violentos papeles de Pacino, y el diario Metro de Madrid no va a dejar de tener publicidad sobre los estrenos cinematográficos de la semana, por violentos que sean.

El otro día me comentaba Diego que su sobrino de siete añitos quería jugar a 'Grand Theft Auto: San Andreas' porque todos sus compañeros lo tenían ya. Menudo disgusto se llevó el chaval cuando descubrió que el ansiado videojuego no aparecía por ninguna parte la mañana de reyes. Y menudo par de hostias tienen tanto los papás como las mamás del resto de sus compañeros de clase y amiguitos que sí tengan acceso al jueguecito de marras…

Pero vamos más allá. En lugar del videojuego, y dada la aparente pasión del chaval por el mundo del monopatín, su madre decidió comprarle uno, además de toda la parafernalia de casco, rodilleras y demás adminículos. Y todo ello lo acompañó con un DVD en el que cuatro famosotes del mundo este del ‘skate’ dan consejos para aprender a ir en monopatín y cosas por el estilo. Primeramente, ningún famosote de estos se ponía el casco y las protecciones en la grabación, y claro, convence tú ahora al niño de que el casco y las rodilleras también son “cool”… Además, a mitad del vídeo, resulta que hay publicidad de una marca de ropa de moda típica en el ámbito del ‘skateboarding’. Sin comerlo ni beberlo, Diego, su hermana y el chaval, contemplan la traidora emboscada publicitaria: Una mujer en un coche detenido junto a la acera que parece tener contracciones. El coche se agita forma exagerada, y los viandantes se acercan al vehículo para ver qué pasa en él. De repente, las puertas del vehículo saltan por los aires, y de éste comienza a manar placenta. Como suena. Placenta. Todo el mundo de mierda hasta arriba, y en el interior del coche, la mujer acaba de parir a dos mozas semidesnudas caracterizadas de conejitas de unos 23 años de edad cada una, que sensualmente retozan y se limpian los restos de placenta y coágulos la una a la otra a lametones.

Peor aún me parece, claro, ese anuncio en el que una mujer tira a su marido por no saber usar su lavadora. O el de la barriguita y las morcillitas (cambien los roles e imagínense la que se montaría). Y es que no me canso de decir que ser hombre y encima serlo hetero ya no mola.

Pero Amnistía Internacional no está para tonterías de ese calibre, claro.

¿Qué opinará Nieves Herrero de todo esto…?

Fue Somófrates a les 11:37 | Comentarios (14)


12. jaanuar 2005

¿Alguna lectora capaz de chuparla sin rozar con los dientes?

Por un error de copypasteo, el post de hoy se ha perdido. Resumen:
Soy capaz de comerme un kilo y medio de plastelina amarilla antes de vomitar.
Me gustan los pijamas de comando G.
Voy a mi puta bola.
Rainman.

Fue Somófrates a les 14:32 | Comentarios (5)


11. jaanuar 2005

GÑÑÑÑÑÑÑÑÑÑ!

Decía Tyler que somos la mierda cantante y danzante (no confundir con el dinero contante y sonante, que es otra cosa distinta, aunque muy probablemente ligada a este concepto) del mundo. Y yo os digo que por mucho que canteis y mucho que dancéis, nunca conseguiréis ser tan mierdas como unos cuantos que yo me sé. Y a otros tantos que no me sé, pero que supongo que están ahí por cómo me zumba el pelo que tengo en mi oreja izquierda.

¿Sabeis lo del yin y el yang, no? Aquello de que no puede haber bien si no es por yuxtaposición y/o intususcepción con el mal y blablabla... Bueno, pues hoy he descubierto que, además, existe el pin y el pong. Dos conceptos que evolucionan y trascienden del principio taoísta básico, para amoldarse a las necesidades de la sociedad mediática del mundo civilizado del siglo XXI. En este caso el pin es el yang del propio pong, mientras que el pong se ve reflejado en el yin del pin.

¿Y a dónde nos lleva esto? A la providencia. A un torrente filosófico que hace del destino algo impepinable. Os pongo un ejemplo: la teoría del caos, con su mariposa y su tifón dejan de consistir en la minería matemática lineal de fórmulas infinitas y ecuaciones. Gracias a este nuevo enfoque, podemos determinar que en realidad el maremoto del Índico tiene su origen en Castellfollit de Rubregos, sin ir más lejos (e intentar rebatirme esto sería clara evidencia de que quién lo haga es un etarra asqueroso).

De lo cual, además, deduzco que por muy mierda, muy cantante o muy danzante que me proponga ser, gracias al pin y al pong, se extrapola fuera del intervalo de dicha magnitud el yin a mi yang (y al de los demás, ya, ni os cuento), poniéndome, muy a mi pesar, aunque no hay mal que por bien no venga, a un nivel nominativo siempre como ése tipo de personas aludidas comúnmente (con cruel agravio y desconsideración desmedidos, añado) como "cachopan".

Y no porque lo diga yo, sino porque hay que ver lo hijos de puta, lo crueles, lo malintencionados, lo egoístas y lo desconsiderados que pueden llegar a ser los demás en cuanto les das una oportunidad para serlo...

En fin, en otro orden de cosas, no tengo perdón del Dios. Casi casi estoy a la altura de la pijapollas de la Britney Spears (¿sabrá esta niña lo que es una prerrogativa?) restregándose como papel de lija por los neumáticos de aquella moto mientras destrozaba el "I love Rock and Roll" de los Blackhearts. Y es que el pasado día 8 fué el cumpleaños del Rey...

a-aha
Va, y para rematar antes de irme a comer:

www.johnandjohn.nl

Fue Somófrates a les 14:11 | Comentarios (4)


10. jaanuar 2005

Dos hombres malos y un regalo de cumpleaños

Harley Davidson and the Marlboro Man meet My Little Pony

Porque nadie dijo que ser feos fuese fácil...

Fue Somófrates a les 16:38 | Comentarios (6)


De malajes

Discutía yo, tras dos botellas de vino, copa y puro, en la sobremesa de ayer con mis comensales y el propio cocinero del local sobre la receta de la pana cotta italiana, sobre si servirla o no con gelatina, y -lo más importante- acompañarla de arándanos, chocolate blanco o caramelo. Entre otras muchas cosas.
A la hora de intentar discernir la frontera que separa la estupidez de la intención, yo, que siempre llevo la razón, y si no la llevo me la invento (¿conocen ustedes a algún otro que haya merecido calificativos como "narcisista apopléjico mental" -o algo aún menos ingenioso, no lo recuerdo con exactitud- de alguien que posee -al menos- tres blogs?), no tuve por más que empequeñecer de pura humildad ante mi hermano, ése mastuerzo alienado subproducto de practicar el levantamiento de cosas y la práctica de las artes marciales desde sus tiernos seis añitos. "Prefiero el estúpido al malintencionado, el culto o el ajeno no se diferencian en malicia" proclamaba yo, abogando por la disociabilidad de ambos especímenes en todo momento, a lo que él matizó: "la estupidez y la ignoranca, tarde o temprano, desembocan en frustración, y ésta a su vez trae consigo hiel y malicia". Evidentemente no lo dijo con estas mismas palabras, ya que esto es una aproximación literata que yo mismo hago sobre el comentario, que en su momento sonó más a mensaje de galletita de la fortuna que a otra cosa. Pero se hizo el silencio en la mesa durante tres o cuatro segundos. Reflexión. Cojones con el pequeño puto saltamontes.

Alguien accionó el sistema de emergencia sacando el socorrido tema del plan Ibarretxe en la conversación, pero esa tonelada de metralla que me saltó a la cara de boca de mi hermano ha permanecido dando vueltas por mi cabezón durante casi 24 horas, y como soy su psicótico obsesivo favorito (de ustedes), pues ahí se lo dejo.

Jueguen a pensar como una mujer por unos momentos y denle vueltas hasta hacer punto de nieve, denle...

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Fue Somófrates a les 13:10 | Comentarios (7)


6. jaanuar 2005

MAGIC fucKINGS

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Fue Somófrates a les 01:01 | Comentarios (2)


5. jaanuar 2005

¡...y nuestro ingrediente secreto!

Hoy esa especie de homínido que se sienta al fondo de la sala, ése que dce ser el jefe de alguien (no el mío, desde luego, se ponga como se ponga), ése tipo que osaba mirarme mal por ausentarme a primera hora aquella mañana por una emergencia médica, le ha dado por dirigirme la palabra de nuevo.

Me levantaba yo, hufano y servicial, como amigo a la par que compañero de esa gente que me amarga la existencia a diario y por sistema, para dirigirme a la máquina de las cocacolas a por un refresco (o viceversa), y en un arrebato de personidad, me ha dado por soltar al aire un "¿alguien quiere algo del office?".
Y el muy cabrón va y me pide un café. Con leche. Un número cuatro sin azúcar.

Mal día para pedirme nada, forastero. Mi obsesión por dejar sin trabajo a Vin Diesel hace que todas las mañanas me levante con espantosas e insufribles agujetas hasta las pestañas. Mis tres semanas de, nuevamente, no fumador hacen que cualquier forma de vida a mis ojos merezca ser relegada al séptimo infierno de una patada en la entrepierna. Y, en definitiva, otros dolores que no son menester plasmar aquí, hacen de mí la reencarnación del puto espíritu navideño.

De modo que, con implacable gesto de tsunami, he procedido. ¡Qué escupitajo, amigos! Un expresso especial con extra de crema. Dios, cómo he disfrutado observando al seboso cerdo degustar su desayuno. Hasta he lamentado haberme lavado los dientes como cada mañana.

Mi dilema viene a continuación: Me estoy haciendo pis. Pero es que no sé si ir al baño, o aguantarme e invitar esta tarde al muy hijo de la gran puta a un nestea...

Nota mental: A partir de ahora, no comer nada que no haya cazado con mis propias manos.

Fue Somófrates a les 15:03 | Comentarios (5)


Putos títulos...

No sé si cuando Superman se sacó la licencia de superhéroe en el exámen teórico le caería alguna pregunta de mecánica. Aquel detalle de la capa era tan estravagante, que muchos le daban la socorrida explicación de que era precisamente gracias a tan medieval complemento por lo que el kriptoniano personaje desafiaba a la ley de la gravedad.
Y esto era así hasta el punto de que se metía en su cabinita, se saltaba los tres botones de rigor para hacer asomar su "S", y se calzaba aquél pijama con los gallumbos por fuera. Y en cuanto la llevaba colgando (la capa), hala: ¡a volar!
Ahora bien, imaginaos al pobre Superman en pleno vuelo, sonrriendo como si no hubiese cámara, sin despeinarse aquél mítico rizo sobre su frente, ajeno a isobaras borrascas o anticiclones, y de repente... ¡plof! ¡SE LE JODE LA CAPA!
Bien sea por no haber mirado el nivel del aceite, o por la revisión de los chopocientosmil kilómetros, en pleno vuelo se ve en una estrepitosa caída en picado. Imaginaos al superhéroe, puño pacá, puño pallá, intentando recuperar los controles del aparato, angustiado, sin comprender del todo qué está pasando. Sin embargo, haga lo que haga, el resultado es inminente: 11:33 A-6: Circulacion lenta por accidente en LAS MATAS km. 27 a 31 hacia MADRID.
Menos mal que es Superman. Superman siempre sale indemne de cualquier situación, siempre que no tenga que subirse a lomos de un caballo.

Y pese a que una de las posibles lecturas de este post podría ser la de que me aburro en el trabajo y tengo que inventarme gilipolleces como esta para no dejar que me coma la monotonía (lo cual no deja de ser cierto), no tengo muy claro qué es lo que quiero expresar hoy. No estoy contento, no estoy triste, no estoy aburrido, ni estoy entretenido. Hoy no estoy. Hoy creo que ni si quiera soy. Lo único que se me ocurre decir son dos cosas:

1.- La vida es como una cesta de navidad. Más concretamente, como la mía.

2.- Menos mal que existen conejílopes.

y añadiré un 3.- de última hora; ¿por qué tengo ganas de reventar una pared a cabezazos?

En fin. Creo que últimamente me masturbo poco...

Fue Somófrates a les 11:46 | Comentarios (4)


4. jaanuar 2005

Pido perdón a los burros

Enrique Meneses
Bitácora
04/01/05, 08.31

Cuando vemos la catástrofe que se ha abatido sobre millones de seres humanos en toda la región del Índico, y habiendo tenido yo una dolorosa pérdida personal, uno se pregunta si no exageramos nuestros pequeños problemas de la vida doméstica de los españoles. Cualquier palabra de tal o cual político es analizada con la mejor o peor óptica posible según seamos partidarios o adversarios. De repente, viendo las imágenes del dolor de quienes eran pobres y han perdido todo salvo la dignidad, acuden a mi mente ideas de rebeldía. ¿Cómo podemos ser tan burros que no sabemos distinguir entre lo fútil y lo realmente importante de la existencia?

¿Cómo es posible que exista una tecnología, que permite avisar de un tsunami, con tiempo para huir hacia las montañas, y que no esté instalada en una región que acostumbra padecer esos fenómenos? Ya sabemos que ser pobre es carísimo pero para eso está la solidaridad de la especie humana. Una vez, en Uganda, ví un elefante moribundo. No podía caminar por una profunda herida en la planta de una pata. Los demás no lo abandonaron y, durante horas, con sus trompas, intentaron ponerlo en pié y que siguiese viviendo. Ahora, el ser humano, después de haberse olvidado de que se pueden disminuir los daños de estas catástrofes, ha reaccionado lo mejor posible para que más de 5 millones de personas vuelvan a ponerse en pié y sigan caminando con su miseria y su dolor a cuestas.

Una discoteca bonaerense, La República de Cromagnon, causa la muerte de 182 jóvenes y cerca de quinientos heridos, en un concierto rocquero de fin de año. ¿Recuerdan los españoles la discoteca Alcalá 20 donde murieron 82 personas en 1983? En ambos casos el aforo había sido sobrepasado por mucho. Las puertas de socorro siempre bloqueadas. En algunos casos para que los jóvenes no se cuelen en los conciertos. En Asunción (Paraguay), el 1 de agosto de 2004, el Supermercado Ikuá Bolaños sufre unas explosiones que se convierten en un pavoroso incendio. El propietario ordena a su personal de seguridad cerrar las puertas para que no le roben. Cuatrocientos muertos. Las gentes, como en Madrid o Buenos Aires, intentaron escapar pero no pudieron al encontrarse las puertas bloqueadas por avaricia pura y simple. En algunas ocasiones, las escaleras de incendios son insuficientes para la cantidad de personas que se admiten por encima del aforo permitido. Todo se reduce a dinero, dinero, dinero. Avaricia o falta de prevención y vigilancia de inspecciones eficientes.

En Estados Unidos, todos los lugares públicos tienen las puertas que se abren hacia afuera, hacia la salida. En sentido inverso no se pueden abrir. Luego no se puede entrar para colarse. Imaginemos en España un incendio en un lugar hacia el que se precipita la gente y encuentra que la puerta se abre hacia la riada de despavoridas personas que buscan salvarse. La presión de la masa impedirá que los primeros fugitivos puedan tirar de la puerta para abrirla. Si se abriese en sentido contrario, la presión favorecería la evacuación en vez de impedirla. Sencillo pero intenten ver cuando lugares en España tienen implantado ese sistema que debería ser obligatorio en todos los lugares donde se concentra gente.

¿Cuántos accidentes debidos a la pirotecnia se producen cada año? El reciente de Dinamarca es criminal. Una fábrica de petardos y fuegos artificiales en medio de una ciudad es de horca para los propietarios los encargados de gobernar la ciudad. Pues repasen la lista y verán cuantos accidentes se producen jugando con pólvora. Lo mismo que con las mareas negras de los petroleros en zonas ecológicamente privilegiadas, como Galicia. Desde tiempos de Franco hasta hoy, tres grandes catástrofes producidas por petroleros han destrozado las costas gallegas, asturianas, cántabras y vascas. ¿No es posible tener los dispositivos listos para atajar esos accidentes? ¿Es más barato no comprar los barcos succionadores necesarios que indemnizar a toda una población costera, aguardar años a que la biología marina se recupere y esperar sentados al próximo accidente sin tener un protocolo de actuación inmediata adecuado?

Pilar Manjón, la madre de un joven que murió en el atentado de Atocha, en su aparición en la Comisión del 11 M pidió a los medios que no volviesen a sacar las imágenes tremendas porque reabren las heridas de quienes perdieron seres queridos o tienen en casa personas discapacitadas desde entonces. Lloré escuchando su mensaje que dejaba por los suelos los de los políticos que llevaban meses peleándose como en un patio de colegio. Debo decir aprobé todo lo que dijo menos lo de establecer una censura sobre las tremendas imágenes. Señora, tengo medio siglo de fotoperiodista a mis espaldas y me he tragado tragedias de todo tipo. No crea que a los corresponsales de guerra nos gusta la guerra: la odiamos.

Usted ha visto que, para vender un producto, los anunciantes tienen que repetir centenares de veces su spot si quieren que llegue a un máximo de gente y, aún con eso, no alcanzan a la totalidad. Imagínese el esfuerzo que los medios tienen que hacer para que penetre en todas las cabezas que hay que erradicar la guerra, el hambre, paliar los embates de la Naturaleza, que los problemas humanos no pueden resolverse a bombazos y distribuyendo dolor. Tengo compañeros que murieron en Vietnam para que las madres de Estados Unidos viesen lo cruel e inútil que era aquella guerra que costó nada más que 58.000 soldados estadounidenses muertos. Los estudiantes de la Universidad de Berkeley, por aquellas imágenes, se echaron a la calle contra esa guerra y Washington tuvo que poner fin a la misma. Señora, no hay que pedir menos fotos crueles, hay que impactar más en la mente de las masas. Si en EE.UU. los medios no se hubiesen estado autocensurando, en este momento, no sabríamos de las torturas de Abu Ghraib o de que sus hijos e hijas están muriendo por un puñado de mentiras lanzadas por los comerciantes de la muerte que se enriquecen con todas las guerras. Por favor, pida que no olvide nadie a su hijo. Ni usted, que ya se que nunca lo olvidará, ni quienes han cometido el atentado de Atocha, el de las Torres Gemelas o el de Bali. Este año 2004 han muerto 117 reporteros, 42 de ellos en Irak. En proporción al número de enviados especiales, es la profesión más peligrosa, mucho más que la de soldado en el frente de Irak. 1.300 americanos con un contingente de 130.000 soldados. Un uno por ciento. Y es así todos los años para nuestra profesión. En 1994, cayeron 157. Por favor, no pida que su trabajo sea escamoteado cuando lo han pagado con semejante precio. Gracias a ellos, todo el mundo está prohibiendo las minas personales y se desmovilizan los niños soldados.


Quiero terminar esta Bitácora pidiendo perdón a un animal noble, paciente, amigo del hombre, al que siempre hemos menospreciado utilizándolo como símbolo de estupidez: el Burro.

Fue Somófrates a les 11:53 | Comentarios (2)


3. jaanuar 2005

¡Feliz cumpletacus-oh, guaja!

- ¿Qué es lo mejor que hay en el mundo? - Un caballo veloz, el viento en tu cabello, y halcones en tu puño. - ¡No! ¿Anuka? - Acero en tu mano, matar a tus enemigos, y oir el lamento de sus mujeres. O ditú.

trajeregional.jpg
¡Crom, concedeme la venganza!

PD: Sí, sé que aún falta un cuarto de hora para que oficialmente sea el aniversario de tu advenimiento al mundo en tu actual meta-forma, pero tengo sueño y me quiero ir a la cama...

Fue Somófrates a les 23:46 | Comentarios (9)